lunes, 28 de marzo de 2011

*

Es impresionante como perdemos el tiempo buscando al amor perfecto basándonos en un amor de cuentos de hadas, descuidando los pequeños detalles imperfectos de la persona que esta más cerca nuestro. 
Quizá sea porque lo tenemos cerca todo el tiempo y no notamos el brillo singular de su persona y nos dejamos llevar por personas que dicen brillar, pero más por dentro están tan opacas por falta de sentimientos sinceros.
Un brillo verdadero, nunca pierde su esplendor y es mucho más difícil de encontrar. 
En cambio, un simple pedazo de metal puede brillar mucho pero con el tiempo pierde su esplendor, y termina siendo lo que siempre fue un pedazo de hojalata, y es tan fácil de encontrar como de perder.
Lo bueno se hace esperar y dura más que, los placeres vagos y pasajeros.   

1 comentario: